LA VERDAD, SIEMPRE LA VERDAD.

Bienvenidos a leer mi blog. Espero que su lectura les sea útil. La finalidad del mismo es entregar información veraz, analizar articulos de medios tradicionales de comunicación y hacer un aporte positivo, en forma respetuosa. Apoyo la libertad de expresión, pero no el libertinaje, basado en la mentira, la manipulación y el engaño. Apoyo la defensa del ecosistema, amenazado por la explotación irresponsable de los recursos del planeta por parte de empresas a las que sólo les interesa acumular riquezas, en desmedro del bienestar de la Humanidad.

Buscar este blog

Vistas de página en total

lunes, 6 de diciembre de 2021

VACUNA OBLIGATORIA ¿ES NECESARIO? ¿ES CORRECTO?

Hay indicios o pruebas de que las vacunas contra el Covid-19 nos pueden ayudar a contrarrestar los efectos del virus. Un estudio científico puede confirmar esto sólo después de mucho tiempo, aún es muy temprano para asegurar algo con total certeza. Al parecer, los países que tienen mayor cantidad de la población vacunada tienen mejores resultados que en países con menos gente vacunada. Es lo que dicen los expertos y los medios de comunicación. Lo que sí es absolutamente cierto es que los efectos secundarios de las vacunas son mucho menores que los que ocasiona una infección provocada por el virus. Por lo tanto, no hay que tener miedo a las vacunas. Por otra parte, hay que respetar a quienes no se quieren vacunar. Estas personas tienen derecho a decidir lo que es mejor para su salud.

En algunos países se intenta imponer la obligación de vacunarse contra el Covid-19. ¿Es necesario? ¿Es correcto hacerlo? ¿No se vulneran nuestros derechos con esta medida? Son muchas las interrogantes que surgen en torno a este asunto. Sería interesante estudiar muy bien la Declaración Universal de los Derechos Humanos (VER).

En primer lugar, si una obligación no se cumple, se debe aplicar un castigo o sanción. Ese castigo o sanción solo se debe aplicar si se comete un delito. ¿Puede, entonces, considerase un delito el oponerse a ser vacunado? Si alguien se opone a ser vacunado se debería considerar el artículo 11, punto número 2, que dice lo siguiente: Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueron delictivos según el Derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito.

Asimismo, tenemos que considerar el artículo 29, que en sus puntos 1 y 2 dice lo siguiente: 1. Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede desarrollar libre y plenamente su personalidad. 2. En el ejercicio de sus derechos y en el disfrute de sus libertades, toda persona estará solamente sujeta a las limitaciones establecidas por la ley con el único fin de asegurar el reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades de los demás, y de satisfacer las justas exigencias de la moral, del orden público y del bienestar general en una sociedad democrática.

Estos artículos intentan encontrar un equilibrio en la definición de libertad, la cual no puede ser absoluta. Nuestra libertad no debe restringir la libertad de otras personas ni perjudicar la salud, economía o bienestar de otros componentes de la sociedad humana. Así como tenemos derechos, también tenemos deberes. Por lo tanto, se pueden limitar nuestros derechos si pretendemos defender el derecho de todos. El derecho de la comunidad debe prevalecer sobre el derecho del individuo. Ese es el principio fundamental de la declaración de derechos humanos.

Ahora bien, cuando queremos obligar a otras personas a vacunarse, debemos considerar su derecho a oponerse, a hacer algo con su cuerpo que ni siquiera podemos asegurar que da 100% de protección y que, además, puede generar cambios negativos en su organismo. ¿Cómo podemos obligar a alguien a hacer algo en contra su voluntad, en su mayor intimidad? Entonces, también se debería prohibir fumar y usar otras sustancias que pueden afectar la salud. Una persona que no cuida su salud perjudica a toda la sociedad. Hay mucha información sobre los peligros de usar drogas, como el tabaco y el alcohol. Por lo tanto, quienes recurren a su uso están conscientes de esos peligros y deberían prescindir de su uso. Esa actitud y las consecuencias de ello ocasiona graves problemas en la sociedad, tanto desde el punto de vista económico como de la salud de quienes son afectados indirectamente por la conducta de un grupo de personas. 


El abuso o mal uso de las drogas ocasiona muertes, tanto de los mismos adictos a las drogas como de sus víctimas.  Sin embargo, no está prohibido usarlas. ¿Dónde podemos fijar los límites? ¿Por qué no se castiga a los adictos (a los que se considera "enfermos", siendo ellos mismos los que han ocasionado su adicción) y sí se pretende castigar a las personas que temen perjudicar sus organismos? En este último caso es más comprensible su actitud. Tal vez, más importante que exigir la obligatoriedad del uso de la vacuna es insistir en mantener la distancia de seguridad, la higiene y el uso de mascarillas cuando no hay suficiente ventilación, en espacios cerrados.



Nota: el autor de este blog ha recibido las tres dosis de la vacuna.