Hay tres audios en vídeo: por ahora solo serán audios aunque en vídeo, sin editar. En el futuro se publicarán vídeos completos y editados.
Cuando ví el primer vídeo con la hilera de hombres vestidos de pantalón y camiseta blanca, rapados, obligados a caminar agachados, con el torso doblado y la cara mirando al suelo, encadenados de pies y manos y empujados por policías, recordé los vídeos que mostraban a presos salvadoreños semidesnudos, siendo transportados como animales, desde hace un par de años. La verdad es que no había mucha diferencia. Lo único que diferenciaba a los dos grupos era la forma en que los vistieron y que, antes eran salvadoreños y ahora eran venezolanos.
En los primeros casos se trataba de hombres, supuestamente, pertenecientes a distintas pandillas de delincuentes. No es posible saber cuantos de los hombres salvadoreños que fueron tratados en esa forma eran criminales. De hecho, la gran mayoría de los casi 80 000 hombres detenidos y maltratados eran inocentes y se los dejó en libertad, después de vejarlos y utilizarlos como esclavos en campos de concentración. Algunos de ellos quedaron en libertad después de haber estado presos durante meses, sin que nadie les pidiera disculpas por el trato injusto al que fueron sometidos.
De los que siguen presos, aunque fuesen culpables de pertenencia a pandillas criminales, no merecen el trato inhumando al que se los somete, como si fueran animales salvajes. Solo hay comparación de trato semejante con el tratamiento que se daba a los esclavos en la antigua Roma.
En cuanto a los venezolanos apresados en Estados Unidos no se los puede acusar de delito alguno, a menos que se los hubiese condenado en un juicio. Estos presos venezolanos no han sido procesados por tribunal alguno, ni siquiera se han presentado pruebas de culpabilidad en su contra. Su único delito es ser inmigrantes ilegales, el mismo delito que cometen a diario millones de personas en el mundo entero, que han dejado sus países por razones económicas, porque soñaban con un futuro mejor.
Aun así, si esos venezolanos hubieran sido juzgados y condenados, se los debería deportar a su país de origen, no a otros país, donde no tienen contacto con familiares, con hijos, madres, hermanos o esposas. Además, el gobierno venezolano siempre ha mostrado una gran diposición de colaborar con Estados Unidos para recibir a los venezolanos que no son bienvenidos en el país del norte.
Todo apunta a que el único delito es ser venezolanos y tener la mala suerte de haber viajado a Estados Unidos. Según Ronald Trump, se trata de enemigos venezolanos que estaban "invadiendo" Estados Unidos.
La idea viene de políticos de la extrema derecha venezolana, cuya máxima representante es Corina Machado. Para muchos políticos de derechas y algunos partidos de pseudo izquierda, entre ellos muchos políticos chilenos, se trata de una banda enviada por Nicolás Maduro a cometer delitos fuera de Venezuela.
Pero, ¿qué es el Tren de Aragua?
El llamado Tren de Aragua fue una banda criminal que operaba en Venezuela, a menudo con la complicidad de la ultraderecha venezolana. Las instituciones venezolanas lograron destruir esa banda, pero muchos de sus integrante lograron huir a otros países. Desde allí llevaron a cabo actos delictivos, algo que ya no podían hacer en Venezuela.
Ser venezolano es, en muchos países sinónimo de delincuente. A los venezolanos se los apoda en forma denigrante como "venecos". Más aún, a casi todos se los asocia con la organización criminal denominada "Tren de Aragua". Sin embargo, los integrantes de esa banda siempre fueron un grupo muy reducido. Pero a cualquier delincuente venezolano se lo tilda de pertenecer a ella. Peor aún, a gran parte de los venezolanos se los trata como delincuentes, a pesar de que la gran mayoría de ellos trabaja, con o sin documentos de regularización en cada país. Entre ellos hay médicos, ingenieros y otros profesionales que tuvieron la suerte de obtener una buena educación en Venezuela, una educación que jamás habrían obtenido en otros países.
También hay trabajadores con menos preparación que trabajan como choferes, obreros de la construcción, operarios en fábricas y otros lugares de trabajo. Por lo tanto, la gran mayoría de los inmigrantes venezolanos son gente honesta y trabajadora. Los delincuentes son una ínfima minoría. Por lo tanto, no hay motivo alguno para generalizar y tratar a todos los venezolanos como delincuentes, menos aún integrantes de bandas terroristas. Esos terroristas son perseguidos y encarcelados en Venezuela. En otros países fueron recibidos como héroes, porque luchaban por lo que ellos llamaban la democracia.
Invito a mis lectores a abrir los enlaces con noticias relacionadas con el tema de esta entrada. Gracias por leer mi blog.
ENLACES RELACIONADOS CON EL TEMA:
VIDEO Conferencia de prensa del presidente de la Aamblea nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez.
Noticia de Marzo, 2024, sobre la criminalidad en El Salvador. Canal DW espanol.
VIDEO de familiar de uno de los venezolanos deportados a El Salvador, univision.
Noticia de El País, de España.