A veces, muy, muy pocas veces, se sabe la verdad. La verdad que ya se sabía, pero que no se podía demostrar con pruebas. Claro, eso no garantiza que ahora se reconozca la verdad, porque antes no sirvieron los testigos ni toda clase de indicios. Las pruebas eran cuidadosamente ocultadas. Era verdad, pero no para Estados Unidos. Así como muchas otras verdades, porque para los dirigentes de ese país sólo es su verdad la que vale. Más aún si se trata de asesinatos.
Espero que no se borre el vídeo que se ha difundido hoy y que ha sido publicado en EL PERIODICO.
Han pasado ya casi tres años desde que los militares de un helicóptero estadouuidense matara a dos periodistas en Bagdad.
No fue la primera vez que eso sucedió. También ocurrió un asesinato similar al comienzo de la invasión de Irak. Aquellos periodistas estaba en un edificio claramente identificable. Tenían cámaras, no fusiles. Pero se dijo que los militares habían actuado frente a un enemigo armado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario