No estamos en la época de Alejandro Magno ni en el siglo XIV. Ni siquiera estamos en el siglo pasado. ¡Estamos en la primera cuarta parte del siglo XXI! Actualmente nadie puede afirmar, con veracidad, que el planeta tierra es plano. Todo el mundo que tiene conocimientos correctos sabe que el sol no es el centro del universo. Tanto la tierra como el sol, la luna y otros astros son objetos astronómicos que giran continuamente gracias a la ley de la atracción gravitacional. Todo astro gira en torno a otro más grande y todos se mueven constantemente en el universo. Las galaxias también giran, en torno a otras más grandes. Todo el universo se mueve.
En la antigüedad no existía la ciencia, toda la supuesta verdad se basaba en suposiciones, hipótesis imposibles de demostrar. No había elementos suficientes para entender lo que sucedía en el macrocosmos o el microcosmos. No existia la biología ni la paleontología, por ejemplo. Tampoco había instrumentos necesarios para investigar o medir para demostrar lo que se suponía. Fue así como surgieron las religiones y la filosofía, que se basaron en esas suposiciones. Se buscaba respuesta a lo que no se entendía.
Asimismo, hubo imperios y reinos que se dividían en clases. No existía la igualdad, en absoluto. Tampoco la hubo en ninguno de los sistemas de gobierno que ha habido después, aunque se han hecho y se continúa haciendo intentos en muy pocos países del mundo por cambiar las condiciones que originan la desigualdad. Lamentablemente, en ninguna parte del mundo se ha logrado la igualdad social. En ningún país del mundo existe la completa libertad. Esto último es más complejo, muchas veces se confunde libertad con libertinaje o se creer que libertad para unos es limitar la libertad de otros, con protección de leyes dictadas por minorías. Se validan esas leyes con la participación de la población, que ni siquiera entiende de artículos ni palabras técnico jurídicas. La minoría se aprovecha de la ignorancia de la gente.
En pleno siglo XXI existen reyes y nobles que gozan de privilegios que les son negados al resto de los ciudadanos o súbditos. Actualmente disfrazan a los reyes como "institución pública" aunque nunca fueron elegidos por las poblaciones de sus países. Los reyes pueden cometer delitos y son inmunes de ser juzgados, como ha sido el caso del heredero de los Borbones en España, Juan Carlos I, restituido en el poder monárquico por el dictador Francisco Franco. A su vez, el dictador Franco se hizo con el poder después de una guerra civil que se produjo a causa del rerrocamiento de un gobierno republicano, que había sido elegido por el pueblo.
Actualmente vivimos rodeados de una diversidad de sistemas de gobierno, que necesita un gobierno mundial para poner más orden, para impedir que países ricos sigan explotando a los países pobres, por ejemplo. O para impedir guerras, invasiones y atropellos de todo tipo. Existe la ONU, que de muy poco sirve, cuyas resoluciones no son respetadas o son vetadas -en la mayoría de los casos- por el país más imperialista de la época contemporánea. La ONU es una entidad obsoleta, que nació con errores garrafales, porque era la Sociedad de las Naciones en sus inicios. Esa sociedad de naciones fue creada para proteger los intereses de países europeos y Estados Unidos, en primer lugar. La ONU reemplazó en 1945 a la antigua sociedad que se había fundado en 1920, pero conservó la misma estructura.
La tierra es redonda, no es plana. ¿Existió el Holocahusto? ¡Sí. Se exterminó a millones de judíos, gitanos, comunistas y personas con discapacidades (léase bien, no sólo judíos). ¡Sí! ¿Alguien puede negar eso? ¡No!
En Palestina se está cometiendo un genocidio que comenzó hace 78 años. Ese genocidio ha ido creciendo al máximo en las últimas décadas y, más aun, en los últimos años y meses. Todos los días mueren cientos de hombres y mujeres inocentes (incluyendo niños). También mueren combatientes, que equivocados o no, han cometido el delito de proteger a su pueblo. ¿Contradicción? Tal vez. Pueden ser terroristas. Pero esos combatientes o terroristas no habrían existido si los sionistas no hubieran robado los territorios palestinos. No habría combatientes de ningún tipo si no se hubiera intentado exterminar a los palestinos (semitas, al igual que los judíos) y se les quitara cada día más y más territorios. Además, esos comtatientes son los menos. Los que más mueren son los que no combaten. Pero eso no le importa a los genocidas. Para ellos da lo mismo son son "culpables" o inocentes.
Si las Naciones Unidas hubieran creado -desde el comienzo- dos estados, uno palestino y otro judío, no existiría siquiera un conflicto entre grupos étnicos que convivieron durante milenios en aquellos territorios. Habrían surgido contradicciones, pero se podrían haber superado con menos violencia. Pero los planes de los sionistas (en su mayoría estadounidenses y europeos) era implantar en territorio palestino un Estado que sirviera para proteger los intereses económicos de las grandes empresas norteamericanas y de países europeos. Golda Meier era ucraniana y los padres de Moshé Dayan eran ucranianos, por ejemplo. David Ben-Gurión nació en Polonia. El actual Primer Ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, es hijo de padre polaco. Mis lectores pueden buscar las biografías de esos políticos en Internet.
El mayor mentiroso, manipulador y cómplice de asesinatos del mundo ha reconocido que desea balnearios de lujo en la Franja de Gaza. El gobierno sionista de Israel amenaza, asesina sin piedad, todos los días. Tanto el uno como el otro pertenecen a los mismos grupos económicos que dominan la política de Estados Unidos, en donde es el dinero el que impone (en elecciones supuestamente democráticas) a los gobernantes. Son los lobbies los que financian las campañas electorales (tanto de candidatos republicanos como de candidatos demócratas) y engañan a un pueblo adormecido e inconsciente. Son los herederos de los Rockefeller y otros multimillonarios que siempre soñaron con dominar el mundo.
Genocidio es genocidio y existe en Palestina (territorio ocupado por una potencia extranjera), digan lo que digan la mayoría de gobernantes europeos, algunos de los cuales ordenan encarcelar a quienes se atreven a mencionar esa palabra o alguna otra que se refiera al sionismo israelí. Intentan (y logran) confundir a la gente con el antisemitismo, cuando hay incluso judíos que estan en contra de los crímenes del sionismo.
Es hora de que todos los hombres y mujeres del mundo sepan lo que realmente sucede en Palestina. Es hora de que un gobierno mundial reemplace a la actual ONU o que ésta se reforme. Es hora de que surjan nuevos movimientos sociales que elijan gobernantes honestos y sabios, gobernantes que no sucumban a sus ambiciones personales y estén al lado de las grandes mayorías oprimidas.
Hay que luchar porque se erradiquen las monarquías de toda clase. Hay que luchar porque no se elijan gobernantes ultraconservadores como Trump, Milei, Bukele, Novoa y tantos otros representantes de la clase más rica del mundo.
¡La tierra es redonda!
¡Existió el Holocausto!
¡Existe genocidio en Palestina desde hace 78 años! No solo desde hace algún tiempo.
Son verdades innegablas